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Los pueblos ubicados en la cuenca baja del río Yaque del Sur no están totalmente inundados, porque durante el paso de la tormenta Gustav, el ayuntamiento de Cristóbal rehabilitó e instaló dos compuertas en el canal Cristóbal, a través del cual, la laguna Rincón en Cabral está vertiendo la mayor parte del agua que recibe, hacia el lago Enriquillo.
Debido a este trabajo hecho por el síndico Douglas Matos, la mayor parte del líquido que está entrando a la mencionada laguna, en vez de penetrar a El Peñón, Cachón, La Hoya, Jaquimeyes, Pescadería, Hato Viejo, Habanero, entre otros pueblos, se dirige directamente al lago.
El síndico Matos, planteó que para evitar las inundaciones en los pueblos de la cuenca del Yaque del Sur se hace urgente dragar el canal Cristóbal, reforzar sus compuertas y construir el dique en de la comunidad de Mena Arriba, Tamayo.
“Estos trabajos deben realizarse antes de que sea construida la presa de Monte Grande, la cual sería la solución definitiva a este grave problema que se registra siempre que llueve torrencialmente en la zona de San Juan de la Maguana”, dijo el ejecutivo municipal.
Matos hizo el planteamiento al agotar un turno en el marco de la reunión sostuvieron los síndicos de esta provincia en el local de la Defensa Civil, en esta ciudad, la cual estuvo presidida por el gobernador provincial, Alfredo Dotel.
Ninguna familia ha sido evacuada
Por su parte, el director provincial de la Defensa Civil, señor Augusto Moreta, dijo que hasta el momento ninguna familia ha sido evacuada de la zona de peligro.
“Anteayer en la noche, cuando el Yaque del Sur destruyó la compuerta del Caño Trujillo, en Mena Arriba, y sus aguas penetraron de golpe a su parte baja, como medida preventiva intentamos evacuar algunas familias a los albergues hasta que pasara el peligro, pero éstas se negaron, por lo que desistimos de la acción”, expresó Moreta.
Dijo que aunque el peligro de inundación a esos pueblos ha disminuido, porque el líquido del río que llega a la mencionada laguna se va directo al lago Enriquillo, las autoridades del Comité Provincial de Emergencia se mantienen alerta, y monitoreando constantemente el nivel de las aguas.
Dejó entrever que si el huracán Ike toca suelo dominicano y empeora la situación en esta zona, entonces, sí “procederemos a sacar por la fuerza a las familias de los lugares críticos, para alojarlas a cualquiera de los 20 refugios que tenemos diseminados en diversos puntos de esta provincia”.
Mientras, que el tránsito vehicular desde esta ciudad a Neyba sigue suspendido por vía de los bateyes del ingenio Barahona, pero funciona normal por el Cruce de Vicente Noble. Tampoco hay tránsito terrestres entre los municipios El Cabral-El Peñón, debido a los daños sufridos por el tramo vial, el cual está totalmente anegado.
Por su parte, el gobernador Dotel, informó que el tránsito Barahona-Pedernales fue restablecido tras brigadas del INDRHI acondicionar un espacio en el lugar denominado Paso Caimán, en la comunidad Los Cocos del municipio de Enriquillo, que anteayer fue inundado por las aguas del mar Caribe y las lluvias provocadas por la tormenta Gustav.
En este lugar había un amplio puente, que fue destruido en septiembre de 1998, cuando el huracán Georges azotó la zona Sur del país, el cual permanece en las mismas condiciones.
El representante del Poder Ejecutivo, señaló que por el momento no hay necesidad de evacuar familias de la cuenca baja del Yaque del Sur, pero que se está en alerta máxima para actuar de inmediato, en caso de que el huracán Ike toque suelo dominicano y complique la situación en esta parte del país.
Debido a este trabajo hecho por el síndico Douglas Matos, la mayor parte del líquido que está entrando a la mencionada laguna, en vez de penetrar a El Peñón, Cachón, La Hoya, Jaquimeyes, Pescadería, Hato Viejo, Habanero, entre otros pueblos, se dirige directamente al lago.
El síndico Matos, planteó que para evitar las inundaciones en los pueblos de la cuenca del Yaque del Sur se hace urgente dragar el canal Cristóbal, reforzar sus compuertas y construir el dique en de la comunidad de Mena Arriba, Tamayo.
“Estos trabajos deben realizarse antes de que sea construida la presa de Monte Grande, la cual sería la solución definitiva a este grave problema que se registra siempre que llueve torrencialmente en la zona de San Juan de la Maguana”, dijo el ejecutivo municipal.
Matos hizo el planteamiento al agotar un turno en el marco de la reunión sostuvieron los síndicos de esta provincia en el local de la Defensa Civil, en esta ciudad, la cual estuvo presidida por el gobernador provincial, Alfredo Dotel.
Ninguna familia ha sido evacuada
Por su parte, el director provincial de la Defensa Civil, señor Augusto Moreta, dijo que hasta el momento ninguna familia ha sido evacuada de la zona de peligro.
“Anteayer en la noche, cuando el Yaque del Sur destruyó la compuerta del Caño Trujillo, en Mena Arriba, y sus aguas penetraron de golpe a su parte baja, como medida preventiva intentamos evacuar algunas familias a los albergues hasta que pasara el peligro, pero éstas se negaron, por lo que desistimos de la acción”, expresó Moreta.
Dijo que aunque el peligro de inundación a esos pueblos ha disminuido, porque el líquido del río que llega a la mencionada laguna se va directo al lago Enriquillo, las autoridades del Comité Provincial de Emergencia se mantienen alerta, y monitoreando constantemente el nivel de las aguas.
Dejó entrever que si el huracán Ike toca suelo dominicano y empeora la situación en esta zona, entonces, sí “procederemos a sacar por la fuerza a las familias de los lugares críticos, para alojarlas a cualquiera de los 20 refugios que tenemos diseminados en diversos puntos de esta provincia”.
Mientras, que el tránsito vehicular desde esta ciudad a Neyba sigue suspendido por vía de los bateyes del ingenio Barahona, pero funciona normal por el Cruce de Vicente Noble. Tampoco hay tránsito terrestres entre los municipios El Cabral-El Peñón, debido a los daños sufridos por el tramo vial, el cual está totalmente anegado.
Por su parte, el gobernador Dotel, informó que el tránsito Barahona-Pedernales fue restablecido tras brigadas del INDRHI acondicionar un espacio en el lugar denominado Paso Caimán, en la comunidad Los Cocos del municipio de Enriquillo, que anteayer fue inundado por las aguas del mar Caribe y las lluvias provocadas por la tormenta Gustav.
En este lugar había un amplio puente, que fue destruido en septiembre de 1998, cuando el huracán Georges azotó la zona Sur del país, el cual permanece en las mismas condiciones.
El representante del Poder Ejecutivo, señaló que por el momento no hay necesidad de evacuar familias de la cuenca baja del Yaque del Sur, pero que se está en alerta máxima para actuar de inmediato, en caso de que el huracán Ike toque suelo dominicano y complique la situación en esta parte del país.
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